El funcionamiento sostenible de una estación de aire comprimido comienza con los detalles. Incluso las fugas más pequeñas en su sistema de aire comprimido provocan continuas pérdidas de energía innecesarias, aumentan los tiempos de funcionamiento de sus compresores y, por tanto, acortan los intervalos de mantenimiento. Esto no sólo supone una carga para el medio ambiente, sino que también puede resultar bastante costoso. En nuestra publicación de blog, le brindamos valiosos consejos sobre cómo prevenir eficazmente costosas pérdidas por fugas.
Incluso las redes de aire comprimido nuevas y bien mantenidas pueden experimentar pérdidas de aire comprimido de alrededor del 15-20 %; en las redes más antiguas, esta pérdida puede aumentar rápidamente al 30-40 %. En consecuencia, las medidas de protección contra fugas ahorran cantidades considerables de energía y dinero, al mismo tiempo que preservan la generación de aire comprimido y proporcionan un mantenimiento preventivo.
Reemplazo de componentes defectuosos
Se pueden encontrar fugas en cualquier parte de una red de aire comprimido. Sin embargo, los que ocurren al inicio de la red suelen constituir la mayoría de los casos. Por ejemplo, las fugas en acoplamientos, mangueras y válvulas, o las herramientas defectuosas, provocan importantes pérdidas de aire. La simple sustitución de componentes defectuosos puede suponer un considerable ahorro de energía.
Pero el envejecimiento de las tuberías también puede provocar problemas: las fugas que se producen aquí a menudo pasan desapercibidas y aumentan innecesariamente el consumo de aire comprimido y, con ello, los costes energéticos. La detección de fugas profesional es la solución en este caso, ya que identifica y localiza las fugas.
La sustitución de elementos con fugas causantes de pérdida energética, es un elemento a tener en cuenta para tener un equipo eficiente y sostenible. Todos estos elementos de su instalación los podrá encontrar en Suministros J.Orts.
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